La economía del Tolima está basada en el sector agropecuario. Primer productor de arroz, segundo de algodón, tercero de café, se cuenta también entre los departamentos ganaderos con diversidad en razas puras, gran riqueza piscícola y de parques y bosques naturales.
La industria del Tolima, tal como ha venido sucediendo con el país, viene perdiendo participación en el PIB, mientras que los servicios ganan más relevancia, fenómeno conocido por los investigadores como desindustrialización. Dentro del sector servicios sobresalen el comercio, la administración pública, otros servicios a la comunidad y reparaciones, las cuales contribuyen con 11,2% y 9,1% del PIB respectivamente.
El PIB por habitante en el Tolima, a precios constantes, registró durante 2002 un descenso de 0,4%, al ubicarse en $1’565.789 en comparación con el alcanzado en 2001 que fue de $1’572.506, valor distante en $143.226 a su máximo histórico de $1’715.732 logrado en 1997. Para Colombia, el PIB per cápita anual en 2001 y 2002 fue de $1’751.959 y 1’754.664 respectivamente.
De acuerdo con los resultados de las Cuentas Regionales del DANE, el departamento del Tolima registró entre los años 2001 y 2002 una disminución, a precios constantes de 1994, de 0,1% en su Producto Interno Bruto (PIB), al pasar de $2,05 billones en 2001 a $2,04 billones en 2002. El resultado se explica por el hecho de que sectores tradicionales dentro de la estructura económica del departamento como el café registró un descenso del 22,4%, restando 2 puntos porcentuales a la variación total, y otros no tuvieron crecimientos importantes o presentaron disminuciones en sus valores agregados. Tal es el caso de las ramas de actividad: transporte, comercio y reparaciones, industria y electricidad gas y agua, las cuales restaron conjuntamente 1,7 puntos porcentuales a la variación, mientras que otros servicios, derechos e impuestos, construcción y resto agropecuario, silvicultura y pesca fueron las ramas con mayor contribución positiva a la variación del PIB al aportar 3,6 puntos porcentuales.
La industria del Tolima, tal como ha venido sucediendo con el país, viene perdiendo participación en el PIB, mientras que los servicios ganan más relevancia, fenómeno conocido por los investigadores como desindustrialización. Dentro del sector servicios sobresalen el comercio, la administración pública, otros servicios a la comunidad y reparaciones, las cuales contribuyen con 11,2% y 9,1% del PIB respectivamente.
El PIB por habitante en el Tolima, a precios constantes, registró durante 2002 un descenso de 0,4%, al ubicarse en $1’565.789 en comparación con el alcanzado en 2001 que fue de $1’572.506, valor distante en $143.226 a su máximo histórico de $1’715.732 logrado en 1997. Para Colombia, el PIB per cápita anual en 2001 y 2002 fue de $1’751.959 y 1’754.664 respectivamente.
De acuerdo con los resultados de las Cuentas Regionales del DANE, el departamento del Tolima registró entre los años 2001 y 2002 una disminución, a precios constantes de 1994, de 0,1% en su Producto Interno Bruto (PIB), al pasar de $2,05 billones en 2001 a $2,04 billones en 2002. El resultado se explica por el hecho de que sectores tradicionales dentro de la estructura económica del departamento como el café registró un descenso del 22,4%, restando 2 puntos porcentuales a la variación total, y otros no tuvieron crecimientos importantes o presentaron disminuciones en sus valores agregados. Tal es el caso de las ramas de actividad: transporte, comercio y reparaciones, industria y electricidad gas y agua, las cuales restaron conjuntamente 1,7 puntos porcentuales a la variación, mientras que otros servicios, derechos e impuestos, construcción y resto agropecuario, silvicultura y pesca fueron las ramas con mayor contribución positiva a la variación del PIB al aportar 3,6 puntos porcentuales.
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